(Bienestar sede Bogotá- 6 de abril de 2011) Acorde  con su apuesta pedagógica, el Jardín de la UN sede Bogotá  prepara  en el marco de la celebración de su cumpleaños No 35, una serie de foros para reflexionar sobre aspectos relevantes  en la formación de la  primera infancia, con el apoyo de la Dirección de Bienestar Sede.

El primero, llamado “Historias y dibujos: el primer espacio para imaginar”, se llevará a cabo este viernes 8 de abril a las 9:00 de la mañana en el Auditorio Juan Herkrath de la Facultad de Ciencias, y se centrará en el lenguaje del color y de los dibujos como el primer acercamiento de los menores de 5 años, más que a la lectura, al mundo de la imaginación.

Para ello contará con una nómina de tres académicos expertos en la materia y  que se han unido a la celebración: Carmen Barvo, Directora de Fundalectura; Rita Flórez, Magíster en Lingüística; y Carlos Riaño, Docente de la UN y autor de diversas publicaciones sobre ilustración infantil.

Según la Doctora Carmen Barvo, “los libros ilustrados permiten un primer acercamiento a lo literario y los niños pequeños llevan una ventaja significativa sobre los lectores experimentados en la percepción de los detalles. De acuerdo con Marion Durand, hay tres procesos importantísimos que hace el niño en la lectura de las imágenes: Reconocer, identificarse con sí mismo e imaginar”

Para la directora de Fundalectura, el panorama en Colombia en cuanto a accesibilidad de la lectura es poco alentador  y considera que  “hay  que concientizar a padres y adultos responsables sobre la  importancia de la lectura en muchos niveles: en el afectivo; en el aprendizaje; en el desarrollo que socialmente conlleva. Hay que invertir en bibliotecas públicas y escolares para dar acceso a materiales de lectura y que sean de calidad”.

A lo largo del 2011, temáticas como pautas de crianza, el juego, el desarrollo emocional, así como un curso de culinaria infantil y el encuentro de ex alumnos del Jardín, realzarán el papel alcanzado por el Jardín durante 35 años de trayectoria, a lo lago de los cuales hoy cosechan la visión de ser una de las mejores instituciones de primera infancia de Bogotá.

Tres décadas comprometidos con la primera infancia
35 años de historia con importantes logros, hacen de esta unidad especial  de la Dirección de Bienestar, una institución con  alto reconocimiento a nivel distrital, por su propuesta pedagógica trabajada por el grupo  interdisciplinario de sus  docentes,  terapistas ocupacionales, fonoaudiólogos, médicos y nutricionistas, en pro de hijos de administrativos, docentes y estudiantes de la UN.

Así lo señala la Profesora Margarita Corredor, Coordinadora General de la Institución, quien ha sido testigo de la evolución en lo académico y administrativo y destaca como un hito el  traslado de sede del  jardín en 2007 desde las Residencias Universitarias, localizadas fuera del campus, hacia modernas instalaciones, construidas para el tamaño y las necesidades de los 150 niños y niñas que habitan a diario ese espacio.

Uno de los avances en los últimos años “ha sido superar el  asistencialismo para enfocarnos en  el  desarrollo integral de niños y niñas, basándonos en las propuestas de autores como Vigotsky, para quien el aprendizaje debe ser autónomo y participativo a partir del juego, la música y la diversión”, afirma la  profesora Corredor.

El aval y alta calificación a través del Registro de Educación Inicial (REI), otorgado por la Secretaría Distrital de Integración Social, representa un primer paso en ese sentido, pues reconoce no sólo la calidad en el cuidado y la protección de los niños usuarios del Jardín, sino que avala su proyecto pedagógico, uno de los primeros en tenerlo y en abanderar la etapa preescolar como el sustrato más sólido para el éxito de los aprendizajes futuros y formales.
Se destaca también la creación de la Sala Amiga de la Familia Lactante, acondicionada para que  los padres y madres de familia de la UN en esta etapa tengan acceso a un lugar para extraer, almacenar y conservar la leche matera, al tiempo que se ofrece asesoría sobre este derecho fundamental de los bebés.

 “El equipo humano hace que el  trabajo sea complementario, las profesoras  diariamente preparan talleres lúdicos para desarrollar cada temática, partiendo de la premisa de que el juego es a los niños como el trabajo a los adultos y buscando que el Jardín sea un espacio de  expresión y diversión”, puntualiza Margarita Corredor.